Por Manuel Ramos
MSFS, AEP, CHFC, LUTCF, CFS, CES, CIS
Economista, Analista y Gestor de Inversiones
Las monedas y billetes que hoy pasan de mano en mano están a punto de ser historia. Los diferentes tipos de criptomonedas ostentan actualmente un éxito remarcable. Bitcoin, una de las principales, alcanzó un récord de 58 mil dólares en el primer trimestre del 2021.
Las criptomonedas son un medio digital de intercambio para realizar algunas transacciones financieras, y cada vez son más populares. Su característica principal es que se encuentran descentralizadas (carecen del control de un Estado, gobierno u organismo) y las operaciones que les involucran se desarrollan sin intervención de terceros. Los diferentes movimientos de criptomonedas funcionan mediante una base de datos también descentralizada conocida como Blockchain, – “cadena de bloques” en español-, la cual consiste en un registro de datos que contiene las transacciones financieras públicas realizadas con dicho activo. Una de las ventajas es que esta cadena, hasta el día de hoy, y por su tipología, resulta imposible de editar.
El movimiento cypherpunk de los años ochenta se definía como el arte que defendía el uso extendido de escribir en claves secretas (criptografía). Solamente aquel que pudiera descifrarlas sería quien podría saber su contenido. En 1983, el estadounidense David Chaum desarrolló e-Cash, un sistema criptográfico. Doce años más tarde creó DigiCash, pero no fue hasta el siglo XXI que apareció la primera criptodivisa o moneda virtual.
En 2009 aparece la primera criptomoneda. Satoshi Nakamoto, una persona hoy en día aún desconocida, tenía la idea de crear una forma de pago descentralizada y sin la intervención de alguna entidad financiera que la controlara. Es entonces que, empleando la tecnología Blockchain, nace Bitcoin.
Blockchain utiliza la criptografía como medio de control, por este motivo es la tecnología base de todas las criptomonedas. Es como un escribano/notario que nunca descansa. Cada ordenador o dispositivo en el cual se descarga el software de una criptomoneda es parte de una cadena de bloques. La fiabilidad de este sistema se debe a que cada nodo o dispositivo contiene una copia exacta de la cadena (de todas las transacciones), garantizando así que la información permanezca inalterable y se encuentre disponible para su consulta y uso en cualquier momento. Esto significa que no solamente se basa en un servidor central donde queda todo registrado, sino que se trata de una red en la que todos los eslabones contienen la información. De ahí que las criptomonedas y sus respectivas operaciones destacan por su alto nivel de seguridad, pues impide llevar a cabo estafas o acciones sospechosas. Esto se debe a que para alterar el sistema se requiere de una potencia computacional superior a la de una empresa como Google o Microsoft. La seguridad, integridad y el equilibro del sistema se mantienen intactos gracias a una red conformada por agentes denominados “mineros”.
Concretamente, la alta tasa de procesamiento de algoritmos es la clave para el correcto funcionamiento del sistema de bloques. Cualquier persona que desee realizar una transacción con criptomonedas a través de una plataforma tiene que recibir autorización del minero, el cual genera las cadenas de bloques específicas para cada transacción. Además, la cantidad de criptodivisas que se minan debe corresponder con la demandada para evitar inflación.
Algunas compañías que comercian con criptomonedas:
Microsoft. La multinacional de soporte y software informático acepta Bitcoin para comprar aplicaciones, películas y juegos, pero aún no los admite como medio de pago por los productos de su tienda en línea, aunque es probable que en el mediano plazo lo incorpore.
Citibank. Fundado en Nueva York hace más de 200 años, este banco acepta tanto Bitcoin como otro tipo de criptomonedas, pese al rechazo por parte de algunas entidades. De hecho, creó su propia moneda digital: Citicoin. Hoy día las personas cuentan con la posibilidad de invertir en criptomonedas y adquirir servicios en Citibank mediante transacciones de activos digitales.
Virgin Galactic. Quien desee tener una experiencia de vuelo espacial puede abonar su pasaje con criptomonedas desde cualquier país o región en que se encuentre. Virgin Galactic recibe todos los meses millones de dólares a cambio de brindar una experiencia espacial única.
Zynga. Conocida como “el gigante de los juegos sociales”, permite desde hace siete años los pagos con Bitcoin a través de un sistema llamado BitPay.
Perspectivas muy positivas a futuro
Las criptomonedas, y su uso en cada vez más países, están creciendo de manera notable. Los especialistas señalan que este fenómeno radica en su elevado nivel de seguridad, el cual permite que las personas confíen en este sistema para ahorrar, invertir, cuidar sus finanzas y, también, ganar dinero. Son cientos de miles los dueños de negocios, empresas pequeñas, medianas y grandes los que apuestan a los diferentes tipos de criptomonedas como: Bitcoin, Litecoin, NEO, Monero y Dash, entre otros.
En el contexto de la pandemia las criptomonedas se han visto favorecidas, pues, a raíz de esto, la crisis económica desatada en todo el mundo ha debilitado los principales sistemas financieros y acentuado la desconfianza en los gobiernos. Aprovechando la oportunidad, Bitcoin y otras criptodivisas han dado lugar a una nueva forma de invertir y, fundamentalmente, de retener valor. El reciente incremento del precio del Bitcoin también ha llevado a las personas a conocer en detalle el funcionamiento del activo digital, y a participar en sus respectivos movimientos.
Surgidas en la década de los 70´s, masificadas en los 90’s, y con un importante protagonismo en la actualidad, las criptomonedas poco a poco se consolidan como el mecanismo más adecuado para evitar grandes pérdidas y resolver inconvenientes complejos. Incluso, hay quienes aseguran que las criptomonedas son el futuro de la economía mundial. De hecho, es muy probable que en el mediano o largo plazo su tecnología y funcionamiento se adopte en diversas naciones con el fin de controlar los movimientos financieros de manera minuciosa y así impedir estafas y transacciones ilegales o acciones sospechosas. Por dar un ejemplo, se estima en el futuro que el sistema Blockchain aplicado en economías nacionales o mundiales pueda impedir los fraudes de multiniveles.
Criptomonedas con respaldo
Si bien, actualmente no todos los países y empresas aceptan y aplican restricciones a las criptomonedas basadas en las cadenas de bloques, la historia de las criptomonedas está dando un giro sorprendente. Suecia inició un período de prueba en febrero del 2020 para estudiar la posibilidad de implantar e-Krona como moneda virtual oficial. La población sueca, acostumbrada al dinero sin efectivo, podría ser testigo de una transición hacia una política monetaria digital. China está también en período de prueba con su criptomoneda, sin embargo, la alianza del Banco Popular de China con SWIFT, la sociedad para las Comunicaciones Interbancarias y Financieras Mundiales y administradora de la red más utilizada para transferencias bancarias podría traducirse en un alcance global de esta divisa.
El e-Yuan (moneda digital de China) ha pasado de ser considerada una moneda emergente a concebirse como un depósito de valor. Actualmente sólo un 2% de las reservas mundiales de divisas están constituidas por yuanes, y previsiblemente este volumen se incremente en el corto o mediano plazo a causa de la demanda de yuanes por parte de los fondos de reserva de los países asiáticos, lo que ayudaría a que la moneda continúe incrementando su valor.
En un futuro no muy lejano, y considerando que ahora el contacto físico se presenta como un factor potencial de peligro para la salud, las cosas apuntan a que estaremos utilizando un sistema monetario virtual. Definitivamente la ciber-biotecnología tendrá un papel esencial cuando las criptomonedas se adecuen y respalden ante los gobiernos y, poco a poco, se conviertan en un común denominador en las transacciones financieras de nuestro mundo.