Por Guillermo Descalzi
Escritor, Periodista y Antropólogo
En relaciones exteriores los tratados entre naciones son cosa sagrada pues se convierten en parte del derecho internacional. Los tratados más importantes de los Estados Unidos primero tuvieron que ver con la adquisición de tierras de Inglaterra, después de los nativos americanos, la corona española, Francia y México… más Rusia, y luego, el último, Colombia. Sí, le quitamos tierras a Colombia. Se puede decir que varios de estos tratados fueron un tanto abusivos… pero, empecemos con el primero.
El Tratado de París (1783)
Marcó el final de la revolución norteamericana contra Inglaterra. Fue firmado por Francia, España y las partes en conflicto bélico. Estados Unidos obtuvo su independencia y sus límites se establecieron al este de los Montes Apalaches, al norte con la actual frontera con Canadá y al oeste con el Océano Atlántico. Al sur, Francia obtuvo Luisiana, comprendida entre el Río Mississippi y las Montañas Rocallosas. Al oeste de ese límite, Florida fue para España. A los nativos americanos prácticamente se les dejo fuera de este tratado, sin voz ni voto ni nada…hasta el siguiente tratado.
El Tratado de Greenville (1795)
Doce tribus indias unidas en una confederación encabezada por el jefe de Miami, Little Turtle, cedieron la mayor parte de los futuros estados de Ohio, Indiana, Illinois y Michigan. ¿Que obtuvieron los indígenas a cambio? Una promesa vacía de “educación y cuidado”.
Compra de Luisiana (1803)
Los Estados Unidos duplican su tamaño expandiéndose al oeste. Thomas Jefferson autorizó la compra de Nueva Orleans. Para sorpresa de los negociadores estadounidenses, Napoleón ofreció la totalidad de todo el territorio francés, desde el Golfo de México hasta la frontera con Canadá. El conquistador peleaba guerras en Europa, así que quince millones de dólares bastaron para que Francia renunciara a su mayor posesión territorial en América.
El Tratado de Gante (1814)
En 1812 los ingleses intentaron recuperar terreno norteamericano. En esa guerra los ingleses, quemaron la Casa Blanca, que en ese entonces no era blanca. Pero la pintaron de blanco para tapar lo quemado… y nos dejó la casa… Blanca. Fue lo único que nos dejó, aparte del refrendo de facto de nuestra independencia.
En el Tratado Adams-Onís (1819)
Florida se había convertido en una carga para España, por lo que decidió ceder ese territorio a los Estados Unidos a cambio de resolver una disputa fronteriza a lo largo del Río Sabine en la Texas española. En ese caso “adquirimos” toda la Florida a cero centavos la hectárea.
Tratado de Guadalupe Hidalgo (1848)
Se firmó el 2 de febrero de ese año en Guadalupe Hidalgo, a donde había huido el gabinete del gobierno mexicano durante la invasión estadounidense (1846-1848). Al término de la guerra, México nos “cedió” poco más de la mitad de su recién formada república -apenas en 1821, México había obtenido su independencia de España- y aceptó el Río Grande como su frontera con Estados Unidos. Dicho territorio forma los actuales estados de Arizona, California, Nuevo México, Texas, Colorado, Nevada y Utah.
El Tratado con Rusia
El 30 de marzo de 1867, Estados Unidos llegó a un acuerdo para comprar Alaska a Rusia por un precio de 7.2 millones de dólares. Lo negociaron y firmaron el Secretario de Estado William Seward y el Ministro ruso en los Estados Unidos, Edouard de Stoeckl. Los críticos del acuerdo para comprar Alaska lo llamaron “Seward’s Folly”, “La Locura de Seward”. El escepticismo a la compra de Alaska disminuyó con el descubrimiento que dio lugar a la “Fiebre del Oro” en Klondike, en 1896.
El (segundo) Tratado de París (1898)
Decretó el final de la Guerra Hispanoamericana, cuando Estados Unidos “adquirió” Puerto Rico, Guam y las Filipinas. En esa guerra el después presidente Teddy Roosevelt comandó tropas a caballo en Cuba, sus “Rough Riders”. Es una guerra a partir de la cual nace el llamado “Siglo Americano”, una bisagra histórica entre la próxima desaparición de la Gran Bretaña como imperio mundial y el surgimiento del nuevo “imperio” americano. (Véase Todo en Finanzas # 4, El fin del Siglo Americano)
La Enmienda Platt (1902)
La Enmienda Plattdejó a Cuba como “protectorado” americano. Estados Unidos se comprometió a defenderla de cualquier intervención extranjera. Luego, un año después, se da el último gran tratado por tierras, el Tratado Hay-Bunau-Varilla.
El Tratado Hay-Bunau-Varilla (1903)
Estados Unidos prácticamente le quitó a Colombia lo que hoy es Panamá y formamos ese nuevo país a cambio de que nos cediera la zona del Canal, a lo que Colombia se habían negado. Estados Unidos actuó con Colombia como: “si no me lo das, entonces te lo quito”, y creamos el nuevo país por razones estrictamente comerciales.
La independencia de la última de las naciones americanas en formarse, el 3 noviembre de 1903, fue seguida dos semanas más tarde por la firma de este tratado, donde Estados Unidos recibía a perpetuidad, una franja de 10 millas de ancho (16 kilómetros) entre el Océano Atlántico y el Océano Pacífico, por donde cruzaría el Canal de Panamá, terminado en 1914. La primera de las inversiones extranjeras en el recién formado Panamá fue de 10 millones de dólares y una renta anual de un cuarto de millón.
Después de esto, los tratados se vuelven mayormente “Casus Belli”, bélicos.
El Tratado de Versalles (1919)
Hay una pregunta histórica sobre qué es lo que realmente condujo al fin de la guerra. ¿La victoria aliada o la “gripe española” de 1918? En esta pandemia enfermaron más de 500 millones de personas, la tercera parte de la población mundial de ese entonces, y se estima que murió el 10%. Arrasó en ambos frentes, el alemán y el aliado, las tropas, sencillamente, no daban más.
En el verano de 1919, el Tratado de Versalles codificó los términos de paz y responsabilizó a Alemania por la guerra. Además de que humilló a Alemania, en realidad, el tratado no resolvió los problemas que habían llevado a la guerra, le impuso penas muy duras: pérdida de territorio, pagos masivos y desmilitarización.
La angustia económica y el resentimiento alemán por el tratado alimentaron el movimiento ultranacionalista que llevó al encumbramiento de Hitler y su partido nazi, apuntando directamente a la Segunda Guerra Mundial que tuvo sus orígenes, se puede decir, en este tratado.
El Tratado de Potsdam (1945)
Terminó la Segunda Guerra Mundial en Europa y este tratado castigó, repartió y desarmó a Alemania nuevamente; además de eliminar a los nazis y decretar los juicios de Núremberg para los criminales de guerra. En la Conferencia de Potsdam, Stalin presentó a los aliados occidentales el hecho consumado de su apropiación de Europa Oriental como esfera soviética, la misma que aparentemente Vladimir Putin quiere restaurar hoy.
Tratado de Washington OTAN (1949)
Es un pacto de defensa mutua entre los países firmantes. Las partes se comprometieron a mantener y garantizar la libertad, el patrimonio común y la cultura de sus respectivas naciones, originalmente doce. En la actualidad son treinta países europeos suscritos a él. Una de las disposiciones en el también conocido Tratado de la Organización del Atlántico Norte (OTAN) establece que un ataque a cualquiera de los miembros se considera como un ataque a todos. Esto es importante, ya que impide que Estados Unidos u otro país miembro intervenga en Ucrania: provocaría al entrada de todos, desencadenando una Tercera Guerra Mundial.
Los siguientes dos acuerdos resultaron en el triunfo, se puede decir, del comunismo.
Armisticio de Corea (1953)
Dejó una Corea dividida en norte y sur, con el triunfo del comunismo en el norte, más de medio siglo después todavía está allí.
Acuerdo de Vietnam (1973)
Terminó con el decidido triunfo del comunismo que hoy gobierna todo Vietnam.
Acuerdos de Camp David (1978)
El presidente Carter ayudó a negociar un acuerdo de paz en el Medio Oriente entre Jordania, Egipto e Israel, el cual llevó a una distención gradual en dicha región. Firmaron Anwar Sadat por Egipto y Menachem Begin, por Israel; a Sadat le costó la vida, fue asesinado unos años después.
El TLCAN (1993)
(Tratado de Libre Comercio de América del Norte), reemplazado en 2020 por el USMCA, (Tratado de Estados Unidos, México y Canadá)
Ambos establecen las pautas comerciales entre los tres países. El presidente Trump llegó a la presidencia con severas críticas al TLCAN por haberse “llevado” empleos a México, y quiso parar esta “fuga de empleos”. Se negoció el USMCA y fue ratificado en 2020, pero no traerá los empleos “fugados” de regreso a los Estados Unidos.
Acuerdos SALT, Strategic Arms Limitation Treaties y START, (Strategic Arms Reduction Treaty)
Son tratados de limitación de armas nucleares. Empiezan a negociarse en 1969, con SALT 1, entre Estados Unidos y la entonces Unión Soviética, y van hasta el 2011, cuando se ratifica START entre los Estados Unidos y la ahora Rusia. Son de vital importancia, pero su espíritu parece ser ignorado ahora que Vladimir Putin ha puesto su cohetería nuclear en estado de alerta, quizás para atemorizar a Occidente por su apoyo a Ucrania, o quizá para su uso efectivo en caso de que el conflicto se amplíe, involucrando a la OTAN y los Estados Unidos.
El presente es un momento en el que existe un verdadero peligro de una Tercera Guerra Mundial y uso de armas nucleares.